Tras unos duros días para nuestra regatista el mundial acaba de la mejor forma posible, proclamándose Subcampeona del Mundo de Clase Europa.
El último día del mundial era decisivo para ella, pudiendo quedar desde la segunda posición hasta la quinta. Tras comprobar el parte de viento la noche anterior, donde se estimaba que sería de entre 12 y 15 nudos, perfecto para ella, los nervios se calmaron un poco. Por desgracia no fue así. Llovió durante toda la noche y amaneció el día sin viento y nublado. El comité de regatas en la reunión de entrenadores barajó la posibidad de esperar en tierra hasta que subiese el viento, pero la gente empezó a irse al agua, incluso nuestros regatistas.
Salieron con cero nudos, una nube negra enorme y una masa blanca al fondo del campo de regatas. Tras llegar a remolque al campo de regatas, en dos minutos diluvió y entró muchísimo viento. Pero después de la tormenta se dice que llega la calma, y llegó. Después de 1h de espera bajo la lluvia, salió el sol (a ratos) y el viento desapareció, pero el comité de regatas decidió dar la salida. No había nada de viento, 3-4 nudos y roladas de más de 30°, junto con unos cambios de presión de viento muy diferentes en todo el campo de regatas. Tú podías ir sin nada de viento y un barco que estaba a 5 metros de distancia iba con otro tipo de viento totalmente diferente. Era una gran lotería. Era cuestión de suerte.
Tras un comienzo malo, Ascen se olvidó de todo y comenzó a remontar. Tras una maniobra perfecta, dejando a sus competidoras más cercanas atrás, logró acabar en la posición que le aseguraba la medalla de plata, por detrás de la danesa.
Todo esfuerzo da sus frutos y, cómo no, este caso no iba a ser diferente.
Ahora un par de días de descanso y vuelta a los entrenamientos con el Nacra, porque habrá que luchar por el sueño “Río 2016”.
¡Qué grande eres Ascen!